Un día rarísimo

El pasado lunes fue un día rarísimo. Todavía teníamos la mente puesta en el GP de la Comunitat Valenciana. Nos acercamos al circuito para realizar los primeros entrenamientos de la nueva temporada, y comenzamos a ver que en apenas unas horas muchísimas cosas habían cambiado.Yo tenía la moto con los colores habituales. Se acabó la moto blanca que utilicé en la última carrera para celebrar los 40 años de Repsol. Me dio un poco de pena, porque ya dije que era la moto más bonita que había visto nunca.
Pero es que, además de recuperar los colores rojos y naranjas de Repsol, en el otro lado del box ya no estaba Nicky, sino Andrea Dovizioso. Fue una sensación rara. Después pude ver a Nicky, con la Ducati.
Fue una sensación rara que se prolongó durante un rato largo: el box, los pilotos con monos diferentes, que ya el mismo lunes se movían por el paddock con un scooter diferente al del día anterior…
Pero bueno, así son las cosas. Nosotros tratamos ese lunes de adelantar todo el trabajo posible. Teníamos intención de entrenar lunes y martes. Pero las previsiones daban lluvia para el martes, así que optamos por esforzarnos a tope y tratar de sacar todo el trabajo el primer día.
En ese entrenamiento ya pudimos probar los neumáticos que emplearemos el año que viene: miras a ver si van a ser suficientes, si consigues buen grip, si se adaptan bien a tu moto o si tienes que hacer modificaciones… Los entrenamientos del lunes y martes fueron muy importantes, tanto para nuestro equipo como para el suministrador, que el año próximo proveerá a todos los equipos.

http://www.repsol.com/es_es/competicion/motociclismo/blogs/blog_pedrosa.aspx