¡Perfecto!

Sólo puedo empezar este texto agradeciendo a la afición el calor que me ha transmitido desde las gradas durante todo el Gran Premio de España en Jerez. Ya dije la semana pasada que ganar en ese circuito es muy bonito. Afortunadamente he podido repetir, al conseguir mi primera victoria ahí en MotoGP.

Es increíble. A veces te metes en una burbuja. Pero el domingo, cuando termina la carrera y liberas la presión, notas algo que no se percibe en ningún otro circuito. Muchas veces corres en países de grandes pilotos y campeones, pero que no tienen ni de lejos algo similar.

En Jerez el calor de las gradas es algo fantástico, inigualable. Saber que hay gente animando a tope haga sol, viento o lluvia, animando sin parar, es algo que el piloto agradece muchísimo. Y he tenido la suerte de poder comprobarlo un año más.

Respecto a la carrera, señalar que salió perfecta. Ni siquiera nosotros pensamos que podría salir tan bien. La noche del sábado vimos rápido que nuestra única opción de ganar era tirar fuerte desde la salida. Lorenzo había rodado rápido y Rossi tiene una motivación especial aquí. Preveíamos una lucha, mínimo, de tres o cuatro pilotos.

Pero volví a realizar una buena salida. Y para mi sorpresa (aunque era una posibilidad), comprobé enseguida que me había ido. El objetivo era irme, pero también sabía que iba a ser bastante difícil conseguirlo. Quería hacer una buena salida para limitar así la lucha en cabeza a dos o tres pilotos.

Una vez destacado en cabeza, intenté controlar la carrera por la pizarra. Nunca dejé de tirar, porque sé que si Valentino tiene alguien delante no ceja nunca en su empeño.

Ahora estoy líder en el Mundial. Me alegro, es algo que me gusta y que no desprecio. Indudablemente es mejor siempre ser líder, pero debemos ser conscientes de que sólo han pasado dos carreras.

Stoner estuvo intratable en Qatar y sólo cogió cinco puntos en Jerez. Dovizioso también estuvo bien en la primera carrera y este fin de semana ha hecho octavo… Las cosas que les han pasado a ellos, me pueden ocurrir a mí en cualquier momento.

Tengo que agradecer al equipo Repsol Honda todo su esfuerzo este fin de semana. Volvió a darme una buena moto. El sábado, mi moto me permitió luchar por la pole, pero había cosas que me hacían dudar. Y entonces Mike, mi Jefe de Mecánicos, me dijo que estuviera tranquilo, porque creía que podían mejorar la moto un poco más. Y así fue. Y pude comprobarlo en carrera.

Lunes y martes nos quedamos en Jerez. No buscamos mejorar nuestros cronos. El objetivo es realizar todas las pruebas que han quedado pendientes en la pretemporada, donde no hemos podido hacer casi nada. Neumáticos, suspensiones… de todo.

Cuando llega una carrera no tienes tiempo de hacer pruebas. Ahí tienes que saber en todo momento qué es lo que funciona y qué es lo que no funciona. Y toda esa información la buscamos ahora.

Debemos ser capaces de hacer en estos entrenamientos todas las pruebas necesarias para acudir a las carreras con todos los datos necesarios para tomar las decisiones correctas. Porque en un Gran Premio no puedes hacer experimentos.